Rosita Quintana, reconocida estrella de la Época de Oro, falleció la madrugada de este lunes 23 de agosto luego de estar hospitalizada y ser intervenida quirúrgicamente para removerle un tumor que se encontraba en la tiroides. A pesar de que la actriz de 96 años había sido reportada como estable y en proceso de recuperación, lamentablemente se confirmó su deceso sin brindarse más detalles al respecto.
Trinidad Rosa Quintana Muñoz nació en Buenos Aires, Argentina en 1925. Debutó a los 15 años como cantante en La Orquesta de los hermanos Caro, donde atrajo la atención del compositor Rodolfo Sciamarella, por lo que comenzó a cantar en el Teatro Casino.
Fue en una de esas presentaciones que el cantante y actor mexicano Jorge Negrete la vio y la trajo a México en 1947, para iniciar sus shows en México en el centro nocturno El Patio, donde su talento y voz le abrieron las puertas a la Época del Cine de Oro.
Alcanzó el éxito en el cine al protagonizar “Calabacitas tiernas”, “Soy charro de levita” y “No me defiendas, compadre”, en las que actuó con Germán Valdés “Tin Tan” y Silvia Pinal. Además, además de otros grandes como Pedro Infante, Joaquín Pardavé, Luis Aguilar y Arturo de Córdova.
También participó en telenovelas y recibió premios por su labor artística, como el del Festival Internacional de Cine de Moscú, el de Berlín y de San Sebastián, además del Wurlitzer a mejor cantante ranchera en 1955.
Aunque aún se desconoce dónde se llevará a cabo el funeral, días antes de su muerte trascendió que deseaba que sus restos fueran depositados en la Catedral de México junto a su esposo, Sergio Kogan, quien era presidente de Columbia Pictures.
La artista tenía 96 años de edad a la hora de su deceso. Se fue una de las pocas figuras que ya quedan del Cine de Oro.
¡Hasta siempre a la conocida también como Dama de América!